Origen
Las escorias de acería LD se originan en el proceso de afinado del arrabio obtenido en el alto horno, eliminándose por oxidación, en todo o en parte, las impurezas existentes.
En el procedimiento Linz-Donawitz (LD) para la transformación de la fundición de hierro procedente del horno alto en acero, el afino se lleva a cabo inyectando oxígeno a presión en el baño que contiene las materias primas y las adiciones para la formación de escoria (fundamentalmente cal, dolomía y espato). El oxígeno se insufla mediante una lanza refrigerada hasta conseguir eliminar del arrabio el exceso de carbono y las impurezas que lo acompañan. El carbono se elimina por oxidación en forma de gas (CO y CO2) y el resto de impurezas queda en forma de escoria semipastosa que sobrenada por encima del acero; ello permite separar la escoria de este por gravedad y enviarla a un foso donde se riega hasta alcanzar temperaturas inferiores a 50ºC.
La escoria tiene, por tanto, como misión fundamental atrapar las impurezas, principalmente fósforo y azufre. Por cada carga de fundición se añade 75-80 kg de cal y dolomía y se retiran de 120 a 130 kg de escoria. La producción de escoria LD representa un 10% en peso de la producción de acero.
Finalizada la operación, el acero colado es transportado para su completo afinado y ajuste de composición química y temperatura. En estas operaciones finales se añaden las ferroaleaciones (manganeso, cromo, níquel, etc.), según el acero que se quiera fabricar.